martes, 16 de junio de 2015

El vino despertador de pasiones

El ángel poderoso entonces llama atención a lo extenso de la ramería de Babilonia la Grande cuando proclama: “Porque a causa del vino despertador de pasiones de su fornicación todas las naciones han caído víctima, y los reyes de la tierra cometieron fornicación con ella, y los comerciantes viajeros de la tierra se enriquecieron debido al poder del lujo desvergonzado de ella”. (Revelación 18:3.) Ella ha adoctrinado a todas las naciones de la humanidad en sus caminos religiosos inmundos. Según el historiador griego Heródoto, en la antigua Babilonia se requería que cada joven soltera diera su virginidad a la prostitución en los templos como parte de su adoración. Hasta hoy mismo se ve representada repugnante corrupción sexual en las esculturas damnificadas por la guerra en Angkor Vat, en Kampuchea (Camboya) y en los templos de Khajuraho, India, que muestran a un dios del hinduismo, Visnú, rodeado de repugnantes escenas eróticas. En los Estados Unidos las revelaciones de inmoralidad que sacudieron al mundo de los evangelizadores de la TV en 1987, y de nuevo en 1988, así como la revelación de que entre ministros de la religión es extensa la práctica de la homosexualidad, ilustran que hasta la cristiandad tolera alarmantes excesos de fornicación literal. Sin embargo, todas las naciones se han convertido en víctimas de una clase de fornicación que es más seria aún.
Recordemos la ilícita relación religioso-política que ayudó a Hitler a ascender rápidamente al poder en Alemania. Otras naciones también sufrieron por la intromisión de la religión en asuntos seglares. Por ejemplo: en la Italia fascista, el 11 de febrero de 1929, Mussolini y el cardenal Gasparri firmaron el tratado lateranense que convirtió a la Ciudad del Vaticano en estado soberano. El papa Pío XI afirmó que había “puesto de nuevo a Italia en manos de Dios y puesto a Dios de nuevo en Italia”. ¿Era verdad eso? Considere lo que sucedió seis años después. El 3 de octubre de 1935, alegando que Abisinia era “un país bárbaro que todavía practica la esclavitud”, Italia invadió a aquella nación. ¿Quién estaba en realidad obrando bárbaramente? ¿Condenó la Iglesia Católica la barbaridad de Mussolini? Mientras el papa hacía comentarios ambiguos, sus obispos se hicieron muy expresivos bendiciendo a las fuerzas armadas de su “patria” italiana. En el libro The Vatican in the Age of the Dictators (El Vaticano en la era de los dictadores), Anthony Rhodes informa:
 “En su Carta Pastoral del 19 de octubre [de 1935] el obispo de Udine [Italia] escribió: ‘No es ni oportuno ni apropiado que nosotros decidamos qué hay de correcto o qué de incorrecto en este caso. Nuestro deber de italianos, y, más aún, de cristianos, es contribuir al éxito de nuestras armas’. El obispo de Padua escribió el 21 de octubre: ‘En las horas difíciles que vivimos, les pedimos que tengan fe en nuestros estadistas y en nuestras fuerzas armadas’. El 24 de octubre el obispo de Cremona consagró varias banderas de regimientos y dijo: ‘Bendiga Dios a estos soldados que conquistarán nuevas y fértiles tierras para el genio italiano en suelo de África, llevando así a ellas la cultura romana y cristiana. Que Italia se convierta de nuevo en el mentor cristiano de todo el mundo’”.
Abisinia fue ultrajada, con la bendición del clero católico romano. ¿Pudieran, en sentido alguno, alegar aquellas personas que, como el apóstol Pablo, estaban ‘limpias de la sangre de todo hombre’? (Hechos 20:26.)
Añada a Alemania, Italia y Abisinia otra nación que se convirtió en víctima de la fornicación de Babilonia la Grande: España. Entre los factores que iniciaron la guerra civil (de 1936 a 1939) estuvieron las medidas que tomó el gobierno democrático para reducir el enorme poder de la Iglesia Católica Romana. Durante la guerra, Franco, el líder fascista católico de las fuerzas revolucionarias, se llamó a sí mismo “el Generalísimo cristiano de la Santa Cruzada”, un título que después abandonó. Centenares de miles de españoles murieron en aquella guerra. Aparte de esto, según un cálculo conservador los nacionalistas de Franco habían asesinado a 40.000 miembros del Frente Popular, mientras que estos últimos habían asesinado a 8.000 clérigos: monjes, sacerdotes, monjas y novicios. Ese horror y tragedia de la guerra civil ilustra lo sabio que es prestar atención a estas palabras de Jesús: “Vuelve tu espada a su lugar, porque todos los que toman la espada perecerán por la espada”. (Mateo 26:52.) ¡Qué repugnante es que la cristiandad se envuelva en derramamiento de sangre tan extenso! ¡Ciertamente sus clérigos son un fracaso completo en cuanto a “batir sus espadas en rejas de arado”! (Isaías 2:4.)
Los comerciantes viajeros
 ¿Quiénes son “los comerciantes viajeros de la tierra”? Sin duda, hoy los llamaríamos negociantes, gigantes del comercio, magnates de los grandes negocios. Esto no quiere decir que sea incorrecto participar en negocios legítimos. La Biblia suministra consejo sabio para los negociantes: amonesta contra la falta de honradez, la avaricia y aspectos similares. (Proverbios 11:1; Zacarías 7:9, 10; Santiago 5:1-5.) La mayor ganancia es “devoción piadosa junto con autosuficiencia”. (1 Timoteo 6:6, 17-19.) Sin embargo, el mundo de Satanás no se rige por principios justos. La corrupción abunda. Se halla en la religión, en la política... y en los grandes negocios. De vez en cuando las noticias dan a conocer escándalos, como malversación de fondos por funcionarios gubernamentales encumbrados y tráfico ilegal de armas.
El mercadeo internacional de armas es un negocio de más de un billón de dólares (E.U.A.) anualmente, mientras centenares de millones de humanos carecen de los artículos de primera necesidad en la vida. Eso es suficientemente malo. Pero parece que los armamentos son un apoyo fundamental de la economía del mundo. El 11 de abril de 1987 un artículo del periódico londinense Spectator informó: “Contando solo las industrias directamente implicadas, en los Estados Unidos hay unos 400.000 empleos envueltos, y 750.000 en Europa. Pero es curioso que a medida que la fabricación de armas ha ido adquiriendo un papel social y económico más importante, la cuestión misma de si los fabricantes tienen una buena defensa ha pasado a un plano secundario”. Por toda la Tierra se obtienen tremendas ganancias por la venta de bombas y otras armas, hasta a posibles enemigos. Algún día esas bombas podrían regresar para destruir con su fuego y poder a los mismos que las venden. ¡Qué paradoja! A esto se puede añadir el soborno y la corrupción relacionados con la industria de las armas. Según el Spectator, en tan solo los Estados Unidos “cada año el Pentágono pierde, inexplicablemente, 900.000.000 de dólares en armas y equipo”. ¡No debe extrañar que Revelación mencione desfavorablemente a los comerciantes de la Tierra!
Como predijo el ángel glorioso, la religión también se ha implicado profundamente en prácticas de negocio corruptas como las que hemos descrito. Por ejemplo, considérese la conexión del Vaticano con el desplome del Banco Ambrosiano de Italia en 1982. El caso se vio durante la década de 1980, y la cuestión que todavía queda sin contestar es: ¿Adónde fue a parar el dinero? En febrero de 1987 jueces de Milán emitieron órdenes de arresto contra tres clérigos del Vaticano, entre ellos un arzobispo estadounidense, con el cargo de que estuvieron implicados en una fraudulenta declaración de quiebra, pero el Vaticano se negó a acceder a la extradición. En julio de 1987 el más encumbrado Tribunal de Apelaciones de Italia anuló las órdenes de arresto debido a un viejo tratado que existía entre el Vaticano y el gobierno de Italia.

 ¿Se implicó Jesús en las prácticas de negocio dudosas de sus días? No. Él ni siquiera tuvo propiedades, porque ‘no tenía donde recostar la cabeza’. A un joven gobernante rico Jesús dio este consejo: “Vende todas las cosas que tienes y distribuye entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sé mi seguidor”. Aquel consejo era excelente, porque, como resultado de él el joven pudiera haberse librado de todas las inquietudes que le causaban sus asuntos de negocio. (Lucas 9:58; 18:22.) En contraste con eso, muchas veces hay enlaces sospechosos entre la religión babilónica y los grandes negocios. Por ejemplo, en 1987 el Albany Times Union informó que el administrador financiero de la arquidiócesis católica de Miami, Florida, E.U.A., confesó que la iglesia poseía acciones en compañías que hacen armas nucleares, películas no aptas para menores, y cigarrillos.

Bailarina se desnuda en la iglesia

Muchas iglesias recurren a sorteos, ferias, bingo y otras formas de diversión a fin de reforzar su concurrencia menguante. La iglesia First Unitarian de Richardson, Texas, sobrepasó eso al usar una bailarina que se desnudaba poco a poco. Un informe periodístico dijo: “Cuando terminó su baile no le quedaba nada sino su pampanilla.” El clérigo encargado comentó que ella había ejecutado el mismo baile que presenta en un cabaret de Dallas, agregando: “No he recibido una sola queja. . . . Armonizó muy bien con nuestro servicio.” Hubo unos 200 adultos y sus hijos que observaron a la bailarina casi desnuda.

Los bautistas son mucho más conocidos por sus luchas que por el fomento de la paz



“. [...] Cuando el problema de la esclavitud [en Estados Unidos] y otras circunstancias dividieron a las confesiones y luego a la nación en el siglo XIX, los bautistas en el norte y en el sur por igual apoyaron el esfuerzo bélico dándole el carácter de una cruzada justa, convencidos de que Dios estaba de su parte. Los bautistas también apoyaron a su país en las guerras contra Inglaterra (1812), México (1845) y España (1898), argumentando en estas dos últimas que se trataba ‘principalmente de llevar la libertad religiosa a los pueblos oprimidos y de abrir nuevos territorios a la obra misionera’. No se está diciendo que los bautistas desearan la guerra en vez de la paz, sino que, en su mayoría, cuando la guerra fue una realidad, apoyaron el esfuerzo bélico nacional y participaron en él”, comenta una revista teológica bautista (Review and Expositor—A Baptist Theological Journal).

Los cardenales explican por qué los católicos dejan la Iglesia

 “El nacimiento y la difusión de sectas o nuevos movimientos religiosos es un fenómeno notable en la historia religiosa de nuestros tiempos. Trabajan con una gran vitalidad”, declaró el cardenal nigeriano Francis Arinze en el consistorio extraordinario celebrado en el Vaticano en abril de 1991, según se informó en la edición semanal vaticana en lengua española de L’Osservatore Romano. Otro cardenal, Ernesto Corripio Ahumada, arzobispo de Ciudad de México, fue aún más directo en su alocución. Dijo respecto a la proliferación de nuevos movimientos religiosos: “Las sectas pseudocristianas más difundidas son los Testigos de Jehová y los mormones”. Asimismo, el cardenal español Ángel Suquía Goicoechea, arzobispo de Madrid, incluyó a los testigos de Jehová entre las asociaciones religiosas “implantadas en mayor número de países”.
¿En qué radica el éxito de estos grupos en zonas y países mayoritariamente católicos? Varios cardenales adujeron diversas razones. Uno de ellos, Ricardo J. Vidal, arzobispo de Cebú (Filipinas), declaró: “El medio más eficaz que usan para lograrlo suele ser un ataque directo contra las enseñanzas y prácticas católicas, especialmente contra la devoción a María, las imágenes, el culto a los santos, el sacramento de la confesión, el papel del celibato sacerdotal, etc.”.
Este comentario reviste interés en vista de que los cristianos del siglo I no dieron comienzo a ninguna de estas prácticas. La confesión del cardenal recuerda la declaración de otro prelado católico, el cardenal Newman, quien escribió en 1878: “La utilización de templos y su consagración a determinados santos [...], las ofrendas votivas [...], el agua bendita [...], [y] más tarde las imágenes [...], son todas [prácticas] de origen pagano santificadas por su adopción en la Iglesia”.
¿Qué otras razones adujeron los cardenales para la “vulnerabilidad” de su grey? Según el cardenal Vidal, una es “la escasez de sacerdotes que podrían ejercer su ministerio respondiendo de una manera personal a las necesidades de los fieles católicos. No hay que maravillarse, por tanto, de que muchas de nuestras diócesis sean campos abiertos para las actividades proselitistas de las sectas”. Ahora bien, ¿a qué se debe la falta de sacerdotes? Un factor de primer orden es la norma antibíblica del celibato sacerdotal, impuesta en la Iglesia latina en el siglo XII, y esto pese a que en 1 Timoteo 4, versículos 1 y 3, las Escrituras explican (según la versión católica Biblia de Jerusalén): “El Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos apostatarán de la fe [...]; éstos prohíben el matrimonio”. (Compárese con 1 Corintios 9:5; 1 Timoteo 3:1, 2.)
¿Qué propuesta para solucionar el problema del abandono de la Iglesia avanzó el cardenal Vidal a sus compañeros de prelacía? “Tenemos planteado el reto de leer y estudiar, meditar y vivir la palabra de Dios.” Esto es exactamente lo que los testigos de Jehová instan a hacer a todas las personas sinceras, sin importar sus antecedentes sociales o religiosos. Por esta razón, están muy resueltos a predicar “esta Buena Nueva del Reino en el mundo entero, para dar testimonio a todas las naciones”, antes de que Dios acabe con este mundo dominado por Satanás. Si su deseo es “leer y estudiar [...] la palabra de Dios”, póngase en contacto con los testigos de Jehová en el Salón del Reino de su población. (Mateo 24:14, BJ; 1 Juan 5:19.)


¿Qué lleva a tantas personas a hacerse testigos de Jehová?


En muchos países la gente está haciendo precisamente eso. Por ejemplo, en Bolonia, Italia, las autoridades eclesiásticas, con la aprobación del papa, celebraron un congreso para estudiar la manera de combatir el éxito de los testigos de Jehová. La Iglesia Católica levantó un “clamor de alarma”, según el periódico La Repubblica, porque cada año diez mil católicos se hacen testigos de Jehová.
El jesuita Giusseppe De Rosa dijo que “desde el punto de vista religioso los más peligrosos son los testigos de Jehová. Vienen completamente adiestrados; siempre tienen la Biblia en la mano”.
En un artículo de fondo que trataba específicamente de los testigos de Jehová, la revista jesuita La Civiltá Cattolica del 18 de febrero de 1984 dijo:
“La primera razón para la difusión de este movimiento está en las técnicas de propaganda [es decir, en la predicación]. Por una parte la obra es esmerada, efectuada de casa en casa por personas a quienes se adiestra escrupulosamente en esta obra, y que están profundamente convencidas [...]
”La segunda razón del éxito de los TJ es la fuerza de atracción del mensaje jehovista, porque puede satisfacer las necesidades, demandas y expectativas de la gente de nuestro tiempo. Ante todo, satisface la necesidad de certezas, algo que se aprecia mucho en un tiempo en que todo es dudoso e inestable. [...] Sobre todo, es una revelación absolutamente segura del futuro, y, por lo tanto, todos los que la aceptan experimentan liberación de todo temor y ansiedad y pueden enfrentarse al futuro con gozo, con la seguridad de que sobrevivirán a la destrucción que le traerá el tremendo día de juicio de Dios a un mundo inicuo, para vivir en felicidad eterna en la Tierra. En segundo lugar, el mensaje jehovista ayuda a vencer la inquietud del individuo frente a los ayes de este mundo, al anunciar que dentro de poco tendrá fin la situación insoportable de hoy día, y que pronto, por lo tanto, habrá una nueva era, nacerá un nuevo mundo del cual serán eliminados todos los inicuos que ahora triunfan. [...]
”La tercera razón del éxito de los TJ es que ese movimiento da a sus miembros una identidad precisa y fuerte, y es un lugar donde se les acoge con afecto y un sentido de hermandad y solidaridad”.
El documento del Vaticano analizó las necesidades de la gente en la actualidad, y la cita anterior tomada de la revista jesuita La Civiltá Cattolica mostró que el mensaje de los testigos de Jehová es lo que satisface esas necesidades. Esto lo muestra también el escritor católico Vittorio Messori en su libro reciente Scommessa sulla morte (Una apuesta sobre la muerte), en el cual escribe:
“Pone a uno a pensar el darse cuenta de que una de estas sectas apocalípticas —los testigos de Jehová— es la confesión o religión que más rápidamente crece en el mundo. Está entre las religiones que más se practican en muchos países [...] y quizás está en primer lugar en lo que se refiere a fervor, celo, activismo, capacidad para hacer prosélitos.
”Y su presencia, cada vez más acentuada, no se limita a países de tradición cristiana, sino que alcanza al mundo entero, donde, en el nombre de Jehová, y en poco tiempo, obtienen resultados que suelen ser superiores a los de misioneros católicos, protestantes y ortodoxos que han trabajado por siglos.
”Esta impresionante fuerza expansiva se les hace incomprensible solo a los que no quieren admitir que [...] evidentemente el modo como entienden la Biblia los testigos de Jehová satisface verdaderas necesidades que otras teologías ya no satisfacen.
”No se puede evitar la cuestión insinuando que los Testigos prosperan porque asustan a la gente. Sucede precisamente lo contrario: A diferencia de las iglesias ‘oficiales’, niegan la existencia del infierno, y predican aniquilación, desaparición definitiva después de la muerte, para los inicuos e incrédulos. Quizás esa sea una perspectiva desagradable; pero ciertamente asusta menos que la amenaza de dolores terribles por toda la eternidad”.
Sí, el Dios de los testigos de Jehová es un Dios amoroso, no uno que aterrorice a la gente.
La siguiente cita es de la revista católica Mondo erre de marzo de 1986: “Debe decirse que los testigos de Jehová son los primeros que viven la fe que predican: No se encolerizan, no fuman, no acumulan riquezas, se mantienen fuera de las discusiones políticas, [...] pagan los impuestos, viven una vida virtuosa y honrada, son felices y serviciales. Todo esto ha hecho que la gente los aprecie”.
Entrevistas de personas que abandonaron el catolicismo
Es interesante considerar algunos relatos de primera mano que muestran por qué dos ex católicos escogieron otra religión.
Rosanna C., una joven casada que vive en la provincia de Parma (en el norte de Italia), dice:
“Tuve una infancia tranquila. Recibí mucho afecto de mis padres y una educación católica normal. Durante la adolescencia desarrollé un deseo que es común entre mucha gente joven: quise hacerme útil a Dios y servirle. Este deseo se intensificó cuando leí un ejemplar del Evangelio que compré en un quiosco de libros. Nunca antes lo había leído. Lo que leí me hizo amar a Jesús. Me di cuenta de que él tenía un mensaje de esperanza para la humanidad, aunque yo no podía entender su significado. También me di cuenta de que sus discípulos tienen que mostrar profundo amor a Dios y a su semejante”.
¡Despertad!: ¿Le satisfacía la manera como practicaba su religión?
Rosanna: En realidad, no. Cuando tenía 17 años enseñé catecismo a niños de 10 a 12 años de edad. Como miembro de un grupo juvenil de la Acción Católica participé en reuniones y meditación espiritual. En sentido religioso me hallaba muy ocupada. Pero había dos cosas que no me gustaban. La Biblia, el libro que tanto respetaba yo, nunca se examinaba, y en el grupo al que yo pertenecía no había verdadero amor altruista ni unidad. Pero eso no era todo. Me preocupaba el hecho de que el grupo aceptaba y tenía en alta estima a un sodomita y a una lesbiana. Cierta tarde no pude contenerme y me puse a llorar.
¡Despertad!: ¿Se le hizo fácil hacerse testigo de Jehová?
Rosanna: ¡De ninguna manera! Al principio, cuando mis padres empezaron a recibir visitas de los testigos de Jehová, no quise escuchar. Sin embargo, después, impresionada por los buenos modales de los Testigos, decidí conocerlos y participé en una consideración de asuntos bíblicos con ellos. Esto fue decisivo para mí. Lo que más me impresionó fue el hecho de que para cada objeción que yo presentaba ellos me daban una respuesta clara tomada de la Biblia.
¡Despertad!: ¿Pidió usted consejo a algún sacerdote después de aquella conversación?
Rosanna: Sí, a varios, y a una monja. Ellos no estaban muy interesados en ayudar a una ‘oveja perdida’. Después de un estudio cuidadoso de la Biblia, simbolicé mi dedicación a Jehová por bautismo en agua en 1977.
Claudio C., de 30 años, de Isernia (en el centro de Italia), dijo:
“A los diez años de edad entré voluntariamente en un seminario de los frailes capuchinos. Deseaba servir a Dios como misionero. La vida de seminarista tenía sus problemas debido a ciertas situaciones que existían en el seminario; pero lo que realmente me perturbó fue que mis superiores rehusaron darme un ejemplar de la Biblia, a pesar de mis grandes deseos de leerla. Me preocupé todavía más cuando un sacerdote nos dijo que el hombre había llegado a existir por evolución. Me di cuenta de que no podía alcanzar mi meta de servir a Dios en el seminario, de modo que lo abandoné a la edad de 15 años”.
¡Despertad!: ¿Cómo se puso en comunicación con los testigos de Jehová?
Claudio: Ellos llegaron a mi casa. Recuerdo que les hice preguntas directas, y me dieron respuestas directas y precisas. Me dejaron dos libros: ¿Llegó a existir el hombre por evolución, o por creación? y ¿Es la Biblia realmente la Palabra de Dios? Los leí y me di cuenta de que la teoría de la evolución no tiene fundamento, y de que las Escrituras han sido inspiradas por Dios. Mi hermano había empezado a buscar conmigo la verdad, y ambos nos preguntábamos si acaso los Testigos en realidad eran los representantes del cristianismo verdadero. Teníamos que examinar más cuidadosamente sus doctrinas.
¡Despertad!: Entonces, ¿qué hicieron?
Claudio: Conversamos con tres sacerdotes y con ministros de varias religiones protestantes. Después de investigar cuidadosamente, quedamos convencidos de que los testigos de Jehová eran quienes realmente ayudaban a la gente a entender la Biblia. Nos bautizamos como testigos de Jehová, y finalmente he logrado la meta de mi niñez de servir a Dios.
¿Está usted dispuesto a comparar sus puntos de vista religiosos con la Biblia, la Palabra de Dios? ¿Tiene el valor de hacer eso con mente abierta?


Se multiplica la adoración de Satanás

Según el periódico Die Vaderland de Johannesburgo, durante las últimas décadas la cantidad de miembros de la iglesia de Satanás en África del Sur ha aumentado de 20.000 a más de 165.000, un aumento de más de 700 por ciento. Citas de la “Biblia Satánica” que aparecen en una solicitud para ingresar en la “Iglesia” pudieran explicar por qué ciertas personas están interesadas en hacerse miembros. Por ejemplo, una cita declara: “Satanás representa el satisfacerse más bien que el contenerse.” Y otra dice: “Satanás representa todos los llamados pecados, ya que todos llevan a la satisfacción física, mental o emocional.” Según el periódico, los “servicios” de esta iglesia se caracterizan por sacrificios de animales, orgías sexuales y el beber sangre.

“Un error de redacción”




Según una profecía del Libro de Mormón, los indios norteamericanos se harían “blancos y encantadores” si se hacían miembros de la Iglesia Mormona. Los mormones creen que la tez oscura de los indios fue una maldición que Dios pronunció en contra de los antepasados de éstos, la cual sería quitada si se hacían mormones. Pero en 1978 Spencer Kimball, el presidente de la iglesia, “anunció una revelación procedente de Dios,” y la iglesia “desechó una doctrina racial que impedía que los negros ocuparan el puesto de sacerdote,” dice un informe reciente del Times de Nueva York. De modo que ahora, en una nueva edición del Libro de Mormón, en lugar de “blancos y encantadores” el pasaje en cuestión lee “puros y encantadores.” Un oficial de la iglesia dijo que “la palabra ‘blancos’ era un error de redacción y que el Sr. [Joseph] Smith tenía la intención de usar la palabra ‘puros’ en la profecía.”